El papel de la naturaleza es tan importante en términos de retención de estudiantes y personal que la Asociación Americana de Salud Universitaria (ACHA) ha delineado un marco para que las universidades mejoren el bienestar de su campus. Entre una variedad de tácticas se encuentra la incorporación de espacios interiores / exteriores de usos múltiples que promueven la conectividad, la circulación y relaciones sociales al proporcionar a los estudiantes una amplia gama de experiencias y un mayor compromiso.

Por ejemplo, las universidades que han creado nodos de actividad orientados a la naturaleza, como módulos de estudio, cabañas y terrazas cubiertas con clima controlado, ofrecen a los estudiantes oportunidades de socialización y estudio al aire libre a pesar de los cambios climáticos estacionales. Además, las instituciones más progresistas están programando sus espacios exteriores con tecnología avanzada para permitir conferencias y presentaciones al aire libre. Esta redefinición del aula, a medida que los espacios interiores comienzan a mezclarse con el exterior natural, forma un enfoque holístico del aprendizaje.

Además, un diseño centrado en los peatones que incorpora parques pequeños, señalización de caminos, iluminación diurna y nocturna, quioscos de seguridad, corredores de tránsito y calles limitadas al alto tráfico, hace que un campus sea más transitable y centrado en los estudiantes. Dando un paso más allá, las comodidades de uso mixto que consolidan las librerías para estudiantes, los centros de investigación, la vida residencial y los cafés pequeños, por ejemplo, brindan a los estudiantes una ciudad pequeña que se siente arraigada en la seguridad y la relajación. También, algunas instituciones están agregando jardines comunitarios, anfiteatros y galerías de exhibición para animar los espacios al aire libre e inspirar un uso nuevo o mayor.

Aunque seguimos confiando en que la creación de un campus en y alrededor de su terreno es una forma segura de atraer aplicantes, la forma en que los estudiantes utilizarán estos espacios seguirá siendo diferente. Desde mítines estudiantiles y prácticas de bandas musicales hasta experimentos científicos y reuniones de equipo, las universidades deben estar preparadas para adaptarse a casi cualquier cosa, lo que hace que la flexibilidad de los espacios al aire libre sea uno de los aspectos más importantes a considerar en el diseño un campus.

La educación se trata de experiencia. Se trata de construir una visión unificada que combine lo que quieren los estudiantes con la salud y el bienestar de ahora para crear una cultura atemporal de diversión y educación de la que la gente querrá ser parte en los próximos años.